Existen razones para acudir a fisioterapia aún sin que exista una lesión. Por lo general se sabe de la actuación de los fisioterapeutas cuando ocurren lesiones deportivas. Por lo general, la fisioterapia es considerada la opción más completa, y eficiente para la rehabilitación. Sin embargo, es importante destacar también la labor preventiva de la fisioterapia.
Es posible acudir a fisioterapia cuando no se padecen patologías o lesiones limitantes. La razón de esas visitas es recibir sesiones preventivas o entrenamiento específico para reducir el riesgo de una lesión.
¿Qué tipo de tratamiento se recibe en estas sesiones?
Sesión informativa de salud y medidas preventivas
El profesional brinda consejos de salud al paciente. Estas son una labor muy importante de los fisioterapeutas. Aunque parezca descabellado acudir a un fisioterapeuta a sólo a pedir información, no lo es. Ésta información es muy valiosa, y es ideal que una persona pueda realizar correctamente una actividad física.
Las medidas preventivas que se ofrecen dependen del ejercicio o actividad que se practique. Por ejemplo, el fisioterapeuta puede recomendar, vendajes para cuidar tobillos en futbolistas, vendajes de dedos para escaladores o pautas para aplicar frío o calor cuando existe una lesión leve y otro tipo de medidas que pueden ayudar a reducir el riesgo de lesión.
Entrenamiento específico y técnicas pasivas
Requiere el apoyo de un fisioterapeuta. Si es especializado en lesiones deportivas, mejor. Un fisoterapeuta es el profesional indicado para guiar a las personas en la realización de ejercicios específicos. Sobre todo cuando se trata de fortalecer zonas más dadas a sufrir lesiones. El ejemplo más común el entrenamiento específico de tipo propioceptivo de tobillos y rodillas, para futbolistas, esquiadores o todos a los que practican ejercicio intenso con riesgo de padecer lesión de estas zonas.
Lo mejor de visitar a un fisioterapeuta son las técnicas activas. Son en las que el paciente participa realizando un ejercicio para mejorar su estado de salud. Algunos ejemplos son los ejercicios de movilidad, estiramientos, o masaje para relajar la tensión de los gemelos o la región lumbar, o bien de otras regiones, dependiendo del ejercicio practicado.
En definitiva, la prevención es más benéfica que la curación. Las medidas preventivas en la fisioterapia es valiosa para la aplicación de medidas correctas.
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